BUENOS AIRES.- La presidenta Cristina Fernández de Kirchner cargó esta tarde contra el sector gremial, tras el paro convocado hoy por la CGT y la CTA disidentes, y para definir la medida de fuerza señaló: "no hablemos de piquete, hablemos de apriete y amenaza".
Afirmó además que "me voy a bancar lo que tenga que bancarme". "A mi no me corre nadie, y mucho menos con amenazas, patoteadas y matones. Esos no son los dirigentes que quería Eva", expresó al encabezar la ceremonia central por el Día de la Soberanía Nacional, en la localidad bonaerense de Obligado.
Cristina se pronunció en contra del "corte, la amenaza o la presión", como metodología, porque "la gente quiere laburar y poder decidir libremente si adhiere o no a una medida", consideró.
La mandataria pidió "perdón a todos los argentinos por no haber podido usar los servicios de la estatal Aerolíneas Argentinas" debido al paro nacional de hoy, "porque de verdad la inversión y los recursos que todos los argentinos hemos puesto y que hoy no pudo volar porque uno de los gremios no prestó funciones".
"No nos tenemos que dejar provocar, recuperamos Aerolíneas cuando había miles de trabajadores que estaban por quedar en la calle. La plata no es mía sino de los millones de argentinos", agregó.
La mandataria, además, le pidió a los gremialistas que estén más involucrados para defender los puestos de los trabajadores. "Me gustaría que todos los dirigentes, principalmente los que dicen representar a los trabajadores, estuvieran más preocupados por defender las fuentes de trabajo, que es el gran desafío que tenemos los argentinos en un mundo que se derrumba". (Télam)